La fuga del hechizero NRC200301

A los niños les encanta trepar, correr, balancearse y deslizarse, y pueden hacerlo repetidamente en La fuga del hechizero. Los niños pueden disfrutar de una escalada desafiante y oscilante por el puente y el sendero, entrenando su sentido del equilibrio y la coordinación cruzada. La coordinación cruzada estimula la percepción intermodal, necesaria para habilidades como la lectura. El sendero de escalada y la hamaca ofrecen puntos de encuentro oscilantes para estar con los amigos y desarrollar habilidades socioemocionales como la cooperación, la empatía y la toma de turnos. Trepar por la estructura, por ejemplo, atravesando el tronco de escalada, puede recompensarse con una bajada estomacal por el tobogán o un deslizamiento por las barras de barandilla. Las barras de barandilla favorecen la coordinación al bajar y entrenan los músculos de los brazos y el tronco.